El escenario digital, como ha puesto de manifiesto la acción ‘All eyes on Rafah’, reconfigura la comunicación social y conceptos como participación activa o compromiso ciudadano entre los jóvenes.
Las estrategias electorales de la antigua Roma, incluidas la propaganda, los rumores y la desinformación, siguen siendo relevantes hoy en día. Existen muchos paralelismos históricos con las campañas actuales y la continua lucha por el poder político y la influencia.
La participación en las elecciones europeas del 9 de junio es crucial para evaluar el impacto de la desinformación. Factores como la indecisión de los votantes, el auge de partidos populistas y las estrategias digitales de desinformación influyen en los resultados.
Bulos, noticias falsas, mentiras, desinformación, teorías de la conspiración, infodemia… Las formas de llamar a este virus que infecta nuestra vida digital son muchas. La realidad es solo una: ataca por todos los flancos.
Colectivos vulnerables como las minorías étnicas o religiosas, migrantes o individuos con una identidad sexual no normativa son víctimas a diario de noticias falsas y discursos de odio sin que nadie se manifieste en las calles pidiendo que cese el acoso.
Las críticas de Max Weber a la política negativa son aún válidas para esfera pública y la comunicación. En su carta a la ciudadanía, Pedro Sánchez se refirió a la “máquina de fango” y a otro enfoque de la política.
Los Estados tratan de combatir la desinformación generada con IA a ritmo de ley, mientras la tecnología dispara contenidos fraudulentos y mensajes de odio a toda velocidad.
El “síndrome de la Habana” se asocia a trastornos cerebrales en personal de embajadas estadounidenses, especialmente en Cuba. Aunque se especula sobre causas y responsabilidades, no hay evidencia clara. Sin embargo, hay sugerencias de que Rusia podría estar involucrada exacerbando la desconfianza en las democracias occidentales.
Los expertos proponen estrategias desde la alfabetización digital hasta la regulación legislativa para preservar la calidad informativa y el derecho a la información veraz. Es necesario luchar contra la desinformación respetando la libertad de expresión. Y es fundamental la transparencia y la responsabilidad tanto de medios como de usuarios para combatir la “infodemia”.
‘Japón alerta de una bacteria carnívora y mortal que podría llegar a España’, rezaba un titular reciente en prensa. ¿Hay motivos para la alarma? La realidad es que no.
En los últimos años han proliferado en redes sociales vídeos que muestran combinaciones sorprendentes de plantas. Aunque la ciencia de los injertos ha avanzado mucho, se trata de contenidos virales completamente falsos.
David Megías, UOC - Universitat Oberta de Catalunya
La desinformación en la Red es un desafío creciente. La combinación de ‘machine learning’ y ‘watermarking’, un conjunto de técnicas para incrustar marcas en contenidos multimedia y texto, ofrece una estrategia resiliente para combatirla.
La educación superior debe ser más decidida en su lucha contra la desinformación y las noticias falsas con programas de alfabetización mediática que formen cuidadanos críticos.
Los bulos diseñados con inteligencia artificial han irrumpido en la escena electoral mexicana e internacional. Su viralidad se refuerza por los sesgos cognitivos y las inconsistencias del algoritmo.
David García-Marín, UNED - Universidad Nacional de Educación a Distancia
En este artículo de la revista Telos, el autor explica la relación entre la capacidad de los algoritmos de transformar la realidad y la adaptación del comportamiento humano a estos cambios, lo que promueve la producción y propagación de contenidos desinformativos.
Los avances en ciencia y tecnología nos permiten hoy hacer previsiones meteorológicas con precisión. Por eso promocionar métodos sin base científica, como las cabañuelas, es una irresponsabilidad y una manera de contribuir a la desinformación.
Ahora que proliferan las complicaciones técnicas para reconocer la falsedad de ciertos contenidos, sigue siendo razonable recordar lo que pierde la sociedad sin la función orientadora de la verdad.
Profesor e investigador en el Máster de Comunicación y Educación en la Red y el Máster de Periodismo Transmedia, UNED - Universidad Nacional de Educación a Distancia