En 2022 los fondos de convergencia autonómica tuvieron el mayor presupuesto de su historia. Y aunque pretenden nivelar los ingresos de las autonomías, su aplicación también provoca diferencias entre regiones.
Nuestro marco constitucional otorga a las comunidades autónomas un reparto del poder tributario que ha provocado una carrera fiscal de la que no se sabe muy bien cuál es la meta.
El Tribunal Constitucional ha anulado los artículos de la ley del ‘impuesto sobre plusvalías’ que establecían la fórmula de cálculo de la cuota, porque siempre presuponía que el valor de los inmuebles transmitidos aumentaba.
La crisis de la covid-19 ha aumentado el gasto público. Antes que subir impuestos, mejor optimizar los recursos, evitando el fraude de algunos contribuyentes y el despilfarro en las Administraciones.
Ronen Palan, City St George's, University of London
Preguntamos a un experto en paraísos fiscales tras las nuevas filtraciones sobre el uso de paraísos fiscales por parte de los súper ricos para ocultar su riqueza.
Comparar la carga impositiva entre comunidades permite ver las diferencias que forman parte del sistema autonómico, creado y avalado por la Constitución, y que son fruto de las decisiones de los propios gobiernos autonómicos.
El objetivo de los impuestos especiales no es recaudatorio. Si la carga económica ha disuadido al ciudadano del consumo, la recaudación será muy baja y la aplicación del tributo habrá sido un éxito.
Aunque con la desaparición del efectivo se reducirían el fraude fiscal, la venta de armas y el terrorismo, su eliminación chocaría de frente con el derecho a la privacidad y generaría nuevas desigualdades.
Contar con recursos propios a nivel local, provincial o regional permite articular políticas sectoriales o tecnológicas concretas, con mayor libertad y mayor capacidad de gestión, lo que ahonda en el desempeño final, tanto en términos económicos como de innovación.
Cuando el tramo autonómico de los impuestos sube, los individuos con rentas más altas trasladan su residencia a comunidades con impuestos más bajos, pero menos de lo que cabría esperar.