Ruth Lazkoz, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
El universo no es infinito. La energía oscura acabará con él. Los datos apuntan a que nos dirigimos al Big Rip, el desgarro final del universo (dentro de 130 mil millones años).
Un nuevo instrumento instalado en el telescopio Mayal de Arizona intentará mejorar nuestra capacidad para medir las distancias de las galaxias y puede ser clave para resolver una de las cuestiones más importantes de la física: ¿cuál es la misteriosa fuerza a la que denominamos “energía oscura”?