Llega el verano, el calor y los planes al aire libre. Es el momento perfecto para dejar al descubierto nuestros pies y darles un respiro de los zapatos cerrados. Pero ¿es seguro?
Caminar adoptando la biomecánica natural del pie conlleva muchos beneficios, siempre que se haga con las debidas precauciones. Una alternativa es el llamado calzado minimalista, que simula la experiencia de andar descalzo sin renunciar a la protección.
En los primeros años de vida pocos hablamos de los pies. Sin embargo, los primeros pasos son clave. Fomentar el gateo, huir del tacatá y no forzar a los bebés a caminar son algunas de las medidas clave.
Los bailarines son un grupo de población especialmente sensible a las lesiones de los pies y tobillos, tanto si bailan flamenco como si andan de puntillas danzando ballet.
El pie es una estructura compleja con gran capacidad de adaptación al medio que pisamos para equilibrar al resto del cuerpo. La población general suele considerar los problemas de esta parte de nuestra anatomía como triviales. Pero no es así.
Para el personal experto en podología y fisioterapia es común escuchar dudas sobre el uso de plantillas para tratar dolor o prevenir lesiones. Pero no siempre están justificadas.
Fisioterapeuta. Personal docente e investigador en los grados de Fisioterapia y Enfermería en la Universidad San Jorge. Miembro del grupo de investigación iPhysio., Universidad San Jorge
Fisioterapeuta y personal docente investigador en la Facultad de Ciencias de la Salud en Universidad San Jorge, profesor asociado en la Facultad de Enfermería y Fisioterapia en la Universitat de Lleida. Miembro del grupo de investigación iPhysio, Universidad San Jorge