La transformación digital de un modelo de negocio no es solo cuestión de tener más ordenadores, una página web más completa, con carrito de compra o más servidores. Exige también cambiar la forma de crear valor.
Con el desarrollo de la RSC se han ampliado las funciones del 'marketing'. Ahora los productos y servicios deben satisfacer las expectativas de consumidores, clientes, socios y sociedad en general.
Comercio electrónico y logística son dos caras de una misma moneda. Al hacer una compra online se adquiere un producto, pero también su entrega en un lugar, tiempo y condiciones determinadas.
El comercio del futuro será un híbrido entre lo digital y lo presencial; la experiencia de compra cobrará importancia, aunque haya menos contacto con el producto y las transacciones sean electrónicas.