Las expectativas respecto al trabajo han cambiado: además de ingresos, los trabajadores quieren también su desarrollo personal. Ahora las organizaciones deben plantearse el bienestar de sus miembros.
Ante un dilema moral, mejor discernir, inferir, razonar e intentar que la decisión tomada sea la que hubiera tomado cualquier persona bienintencionada en nuestra situación.
Retrato del Padre Baltasar Gracián obra de Valentín Carderera en 1840.
BNE -Biblioteca Digital Hispánica
Los 300 aforismos contenidos en “El arte de la prudencia” (1647), del padre jesuita y escritor del Barroco español Baltasar Gracián, son perfectamente aplicables a la gestión empresarial del siglo XXI.
Estatua del compositor Johann Sebastian Bach en Leipzig (Alemania).
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Contrariamente al mito romántico de que los genios necesitan libertad y ausencia de presión, la experiencia muestra que establecer plazos o limitar recursos pueden aguzar el ingenio y la creatividad.
En las carreras técnicas o tecnológicas no se suele dar el espacio y la importancia necesarios a las habilidades ‘suaves’. Una vez adquiridas, son duraderas, como la capacidad de liderazgo y la empatía.
Alcanzar la excelencia en la gestión requiere disciplina, práctica y trabajo duro. Practicar las virtudes enunciadas por los filósofos de la Antigüedad puede ayudar a la consecución de esta meta.
La educación en salud apoyada en museos busca sacar a los estudiantes de medicina o ciencias sociales del ámbito jerárquico de la universidad, observar obras de arte y compartir sentimientos sobre ellas.
En el futuro todas las profesiones contarán con el apoyo, directo o indirecto, de la tecnología. Tenderán a automatizarse las actividades que no aporten valor, manteniendo a los trabajadores en aquellas más creativas. Pero el algoritmo aprende.
El centro de estudios de recursos humanos de la escuela de negocios de IE University analiza las acciones desarrolladas a raíz de la pandemia por algunas de las principales empresas españolas para mantener la operatividad del negocio y preservar la salud de sus empleados.
Las personas tendemos a sobreestimarnos en muchos aspectos de la vida: somos los más honestos, las mejores personas, los más observadores… Hasta que nos preguntan por nuestra capacidad para recordar los nombres de los demás. En eso ya no somos tan buenos.
Dentro de tan solo cinco años se crearán unos 133 millones de empleos, para los cuales se requiere una formación muy específica. El mundo está cambiando y la tecnología (sobre todo, la inteligencia artificial) están a punto de revolucionar el mercado laboral.