Los ríos temporales a menudo se perciben como entidades marginales que pueden interrumpirse con construcciones o contaminarse sin consecuencias. Pero estos cauces son una pieza fundamental del paisaje mediterráneo que debemos conservar.
Piscina fluvial en Acebo (Cáceres, España).
JCDphoto / Shutterstock
La actividad humana está provocando la salinización de ríos, lagos y otros sistemas acuáticos. Este fenómeno afecta a la calidad de las aguas y tiene graves consecuencias para los seres vivos.
Invernaderos junto a Doñana, a la izquierda de la imagen.
EBD-CSIC
Recientemente se ha aprobado una nueva propuesta para ampliar los cultivos considerados regables en el entorno de Doñana. La medida perjudicará la conservación de los humedales del parque nacional, patrimonio de la humanidad.
Estudiar las marismas mareales durante 35 años ha permitido a un equipo de investigadores describir la formación y evolución de estos ecosistemas con gran potencial para capturar carbono.
La presencia de contaminantes emergentes, como microplásticos, fármacos y conservantes, no para de crecer. Estudiar su presencia, origen y efectos tóxicos permite conocer la magnitud del problema.
La planta acuática ‘Persicaria amphibia’ vive en charcas y corrientes de agua estancadas.
Jorge García Girón
A pesar de ser una gran desconocida, la flora acuática supone casi el 5% del total de las especies vegetales en España. Ejerce funciones imprescindibles para los ecosistemas.
La pandemia ha obligado a la ONU a posponer la última ronda de negociaciones para lograr un acuerdo internacional sobre la biodiversidad marina de las zonas situadas fuera de la jurisdicción nacional.
Plásticos en la desembocadura del río Segura.
Shutterstock / Stu49
Meritxell Abril, Universitat de Vic – Universitat Central de Catalunya
Identificar las fuentes de estos contaminantes, los factores que influyen en su transporte y su efecto en los ecosistemas acuáticos permitirá desarrollar estrategias para reducir su acumulación.
Como este caballito de mar, muchos animales encuentran alimento y protección en las praderas de posidonia.
Evarist González
La actividad humana ha introducido en el océano una gran cantidad de fuentes de contaminación acústica, como barcos y explotaciones de petróleo, que contribuyen a la pérdida de biodiversidad marina.
Durante las avenidas, la fuerza de la corriente arrastra a algunos peces de arroyos de buena calidad hacia el río Tinto, donde no pueden soportar los altos niveles de contaminación y mueren.
El agua de los ríos Tinto y Odiel tiene un pH muy ácido y transporta muchos elementos tóxicos como arsénico, cadmio y plomo debido a los lixiviados de las minas de sulfuros.
Las poblaciones de algunas especies marinas de interés comercial están disminuyendo. Controlar la pesca y establecer zonas de protección y refugios climáticos son medidas esenciales para evitar mayores declives.
El 14 de marzo se celebra el Día Internacional de Acción por los Ríos. Es necesario frenar el deterioro que sufren a causa del hombre, mejorar el estado de los ecosistemas acuáticos y promover un uso sostenible del agua.
El virus se ha encontrado en aguas residuales y, aprovechando la pandemia, se ha aprobado la construcción de presas en ríos de Latinoamérica.
Se estima que hay 100 000 000 000 000 000 000 000 000 000 bacterias SAR11 en los océanos. Y que por cada barcteria SAR11 hay 10 virus.
Shutterstock / Tracey Jones Photography
Los virus son los organismos más importantes de la biosfera. Eso es así porque la mayoría sobrevive en el interior de las bacterias más numerosas del océano, las SAR11. ¿Cómo es que no las matan?
Las olas de calor marinas, cada vez más severas y frecuentes, provocan el aumento de la mortalidad de los organismos y un cambio en la composición de especies de los ecosistemas acuáticos.
Dos proyectos de investigación analizan los efectos que el cambio global va a provocar en diferentes especies de escarabajos endémicos de Sierra Nevada y la Sierra de Madrid.
El sistema de lagunas de Doñana en un año de buena inundación.
Hector Garrido/EBD-CSIC
Desde los años 80, se advierte sobre el riesgo de desecación y de acortamiento del periodo de inundación de las lagunas de Doñana causados por las extracciones de aguas subterráneas.
Profesor Titular de Universidad de Geografía Física. Coordinador del Mediterranean Ecogeomorphological and Hydrological Connectivity Research Team, Universitat de les Illes Balears