La pandemia puede afectar más psicológicamente a algunos perfiles de sanitarios, como los jóvenes, los menos formados o los que tienen menos apoyo social. Pero todavía falta estudiar su impacto real.
Actualmente, gracias a la inteligencia artificial y la huella digital de una persona que ha fallecido, es posible recrear conversaciones con quienes ya no están. Sin embargo, esto podría suponer riesgos para aquellos que están sufriendo el duelo.
Plantear la epidemia como una guerra genera las mismas reglas que un contexto bélico. Un escenario en el que no hay duelo porque podría afectar a la moral de la retaguardia confinada.
Enfermero en Osakidetza- Servicio vasco de salud. Profesor asociado a la Facultad de Medicina y Enfermería, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Directora del Departamento de Enfermería de UIC Barcelona y Presidenta de la Conferencia Nacional de Decanas y Decanos de Enfermería, Universitat Internacional de Catalunya