Si preferimos que alguien compruebe por nosotros qué es verdad y qué no, acabará mintiéndonos ‘por nuestro bien’, que es la más persistente y repetida mentira de la historia.
Los lectores tienen que intentar dilucidar qué es correcto y qué no. Internet les exige que lean como un científico, aun sin el entrenamiento necesario.
La proliferación de noticias falsas constituye un desafío capaz de debilitar los pilares de la salud pública. Los ciudadanos tienen herramientas para combatir las intoxicaciones informativas. ¿Pero saben cómo usarlas?
Medios de comunicación, periodistas, expertos y ciudadanos tienen la responsabilidad de verificar la fiabilidad y objetividad de la información que consultan y difunden.
En la información relativa al coronavirus ha habido fake news, pero también intentos de contextualizar los hechos y dar pautas de conducta proporcionadas. ¿Por qué ganan la partida las primeras?
¿Son los contenidos televisivos hoy perjudiciales para la audiencia? Para el mundo académico calidad equivale a información imparcial junto a contenidos culturales y educativos. En España, la confianza en la televisión es la quinta más baja de UE.
Conspiraciones que se revelan por WhatsApp y noticias que no salen en los medios. Cuidado con creernos bulos solo porque casan con nuestras ideas preconcebidas.
El modelo de negocio dominante en la industria digital no prefigura un futuro tecnológico emancipador. La dietética digital plantea una desconexión parcial y temporal, necesaria para reprogramarnos y reconectarnos.
La mayor fuente de información de los jóvenes son Youtube y las redes sociales, muchas de ellas las de sus famosos favoritos. Es necesario que reciban formación crítica para que adquieran la capacidad de elegir las fuentes fiables correctamente.
En situaciones de crisis, las administraciones públicas usan las redes sociales para informar, colaborar con los afectados y alertar a la población sobre posibles riesgos.
Roberto Aparici, UNED - Universidad Nacional de Educación a Distancia and David García-Marín, UNED - Universidad Nacional de Educación a Distancia
Las burbujas informativas no son un fenómeno nuevo. Si siempre hemos consumido los medios más próximos a nuestra ideología, ¿por qué estas cámaras de eco generan tanta atención a la hora de explicar la circulación de la desinformación en los entornos digitales? La clave es comprender los procesos que se desarrollan en su interior. No es la burbuja, es lo que pasa dentro.
No veremos a los moderadores de los debates confrontar a los políticos con sus propios datos erróneos. Un hecho que haría que los que participan en los debates empezaran a respetar su compromiso con la confianza de los votantes.
La campaña electoral ha estado protagonizada por el papel de los medios y las encuestas. Los índices de participación y el fin del bipartidismo revelan, tras los resultados, que gobernar hoy depende de los pactos.
Las redes sociales pueden ser un igualador social, pero también pueden ser un arma que nos manipula y elimina nuestra privacidad. Una gran parte de la responsabilidad es nuestra.
La Unión Europea ha preparado un plan de respuesta para hacer frente a las ‘fake news’ de cara a las próximas elecciones, y el Gobierno español ha creado un equipo de trabajo para detectarlas.
Profesor de Psicología Criminal, Psicología de la Delincuencia, Historia de la Psicología, Perfilación e investigador psicosocial. Experto en historia de la novela gráfica., Universidad Camilo José Cela
Profesor e investigador en el Máster de Comunicación y Educación en la Red y el Máster de Periodismo Transmedia, UNED - Universidad Nacional de Educación a Distancia