Una investigación cualitativa detecta áreas de mayor compromiso entre los estudiantes de secundaria y universidad en Málaga y Cádiz: el medioambiente y los derechos animales.
Que dos de cada diez estudiantes universitarios abandonen los estudios tiene repercusiones económicas y personales. Pese a las múltiples causas, ofrecemos una guía de posibles soluciones.
Competir en determinados ámbitos es compatible con el respeto y la colaboración. Más allá del deporte o los juegos, la competitividad puede resultar excesiva y volverse contraproducente.
No todo es ser listo o estudiar mucho: hay capacidades ‘metacognitivas’ como la autorregulación o el razonamiento que predicen y contribuyen a nuestra satisfacción académica.
Aunque lo que más motiva a cada estudiante puede variar, hay motivaciones universales que el docente puede apoyar: la búsqueda de autonomía, de competencia y de conexión.
El estrés de los estudiantes (y en especial en España) está aumentando. Ofrecemos algunas claves para reducir el estrés escolar, basadas en la investigación actual sobre este tema.
Una de las tareas fundamentales de la universidad es fomentar que los estudiantes aspiren a la precisión en el uso del lenguaje. La precisión es precisamente la que nos conduce a la verdad.
Laia Subirats, UOC - Universitat Oberta de Catalunya et David Bañeres, UOC - Universitat Oberta de Catalunya
Hay quienes se pegan un ‘atracón’ de última hora y quienes son capaces de estudiar de manera programada a lo largo de todo un trimestre. ¿Alguna de las dos estrategias funciona mejor?
La bicicleta es un medio de transporte especialmente idóneo para los campus universitarios; proyectos como este animan y ayudan a personal y docentes a usarla también.
Un estudio desvela que los estudiantes se preocupan por el medio ambiente y que la pandemia ha influido en su concepto de vida urbana y rural: relacionan la primera con la ‘enfermedad’ y el ‘agobio’ y la segunda con el ‘bienestar’ y la ‘tranquilidad’.
Apoyándonos en análisis y estudios existentes sobre métodos educativos, podríamos tomar decisiones más informadas. Aunque la educación no sea una ciencia exacta, hace falta más método científico.
La educación en salud apoyada en museos busca sacar a los estudiantes de medicina o ciencias sociales del ámbito jerárquico de la universidad, observar obras de arte y compartir sentimientos sobre ellas.
Las investigaciones disponibles ponen de manifiesto que los estudiantes de Economía muestran comportamientos más egoístas y menos cooperativos que la sociedad en general.
Los jóvenes han nacido en internet y crecen inmersos en él como medio casi exclusivo con el que conocer el mundo. Sin un acompañamiento adecuado, se enfrentan a una serie de riesgos sin precedentes.
Un estudio realizado a partir de la experiencia y el diálogo de un grupo heterogéneo de 16 estudiantes muestra que la mejor política de inclusión es la que parte de la voz del alumnado.
Hay ocho pautas fundamentales para que el acto de pensar sea palpable en el aula y se convierta en aprendizaje. Entre ellas, dar ejemplo, dar tiempo, usar el lenguaje, y fomentar la participación.
La universidad necesita cambiar, transformarse y adaptarse a poblaciones tradicionalmente no esperadas y a los jóvenes del siglo XXI. Esta transformación debe ser curricular, metodológica y, sobre todo, inclusiva.
Profesora del Departamento de Educación y Coordinadora Académica de Prácticum de Máster Universitario de Formación del Profesorado, Universidad Nebrija