Hay tecnologías que pueden tener un impacto positivo y a largo plazo en el aprendizaje y la enseñanza. Pero antes de ponerlas en marcha hay que preguntarse cómo y para qué las usamos.
Sam Altman regresa al frente de OpenAI con más poder que antes. Se ha deshecho del consejo de administración que lo despidió de manera fulminante hace apenas 5 días.
Del Modo Diablo a la Doble negación. La guerra de los prompts entre los desarrolladores de las inteligencias artificiales y los que consiguen superar los límites legales evoluciona cada día.
Los autores de este artículo publicado originalmente en la revista Telos de Fundación Telefónica reflexionan sobre el potencial creativo de los algoritmos de inteligencia artificial generativa y los desafíos y oportunidades que presenta su uso en la universidad.
Los trabajos de fin de grado son imprescindibles para obtener el título; pero en demasiadas ocasiones no aportan ni investigan temas novedosos. La IA los pone todavía más en peligro.
Javier Rainer, UNIR - Universidad Internacional de La Rioja
¿Podrían los robots desarrollar algún tipo de trastorno, enfermedad o dependencia? Si con la IA generativa las máquinas toman sus propias decisiones. ¿Pueden elegir “mal” y caer en adicciones o cometer delitos?
La inteligencia artificial ofrece más respuestas a un problema, pero la humana es capaz de imaginar soluciones fantasiosas, no evidentes. Combinarlas permite generar más ideas innovadoras.
La IA educativa puede convertirse en una herramienta que favorezca mayor personalización, creatividad y comunicación entre todos los agentes que participan en los procesos de aprendizaje.
La llamada inteligencia artificial está en un momento de enorme vigencia mediática, pero probablemente desde la perspectiva equivocada. Con respecto al periodismo está en total desventaja. A la IA le falta el olfato periodístico.
La introducción de la inteligencia artificial en la clase de ciencias exige el desarrollo de nuevos conocimientos tecnológicos, didácticos y éticos en los maestros.
El poder de las imágenes es indiscutible en nuestra percepción de los hechos históricos. Con la IA y las imágenes manipuladas, se vuelve todavía más importante alcanzar una mirada analítica y crítica.
Es posible aprovechar el uso de IA en el aula para aprender comprensión lectora e impulsar la escucha activa, en diálogo permanente con los estudiantes.
Daniel Losada, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Las tecnologías digitales no están corrompiendo la educación, pero tampoco la están mejorando. Solo una planificación sosegada hacia una escuela para todos nos puede llevar a un desenlace positivo en su integración.
Unos saludan la llegada de la inteligencia artificial, otros se muestran temerosos. También en el campo de la educación. Con el apoyo de los profesores, la IA puede ayudar a desarrollar el pensamiento crítico de los alumnos.
El desarrollo de la IA generativa ya es imparable, por eso se hace imprescindible que también sea ético y responsable. Por ello habrá que, entre otras medidas, acordar estándares y legislar a escala global.
Para crear un test válido que identifique a una inteligencia artificial, antes hay que analizar en qué nos diferenciamos: el impulso, la ética, la intención y los remordimientos
Los mercados financieros adoptan tecnologías cada vez más complejas: la última, la IA. Pero son tantas sus variables que será difícil que la inteligencia artificial logre hacer predicciones a largo plazo.
El foco lleva puesto tiempo sobre la comunidad matemática. ¿Nos dejará la inteligencia artificial sin trabajo? La respuesta parece estar en la creatividad que necesita nuestra labor.
Especialista en Matemáticas y Didáctica de las Matemáticas. Adjunto al Vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado, UNIR - Universidad Internacional de La Rioja