Una comunicación efectiva no es sólo responsabilidad del hablante, sino también del oyente. Siendo conscientes de nuestros prejuicios al escuchar al otro podemos esforzarnos por eliminarlos.
Alaitz Artabe, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
No solo un salario competitivo atrae talento a las empresas. Las oportunidades de carrera y la formación continua están entre los beneficios más valorados por los jovenes profesionales.
Los certificados oficiales de idiomas son una manera de demostrar de manera estandarizada el nivel de competencia en una lengua extranjera. Siendo muy útiles para algunas cosas, no siempre son imprescindibles.
Mantener la inquietud por seguir aprendiendo no solo nos ayuda a encontrar o cambiar de trabajo, sino también a nuestra motivación y satisfacción laboral.
La formación profesional continua es hoy más posible que nunca. Podemos diseñar nuestra propia hoja de ruta, teniendo en cuenta una serie de consideraciones básicas.
Termina el bachillerato (o la ESO si se opta por FP) y tenemos que tomar decisiones que marcarán nuestro futuro. Un equilibrio entre la reflexión personal y el apoyo de la familia puede hacerlo más fácil.
Cada persona tiene una diferente ecología de aprendizaje, que depende de sus concepciones, motivaciones y expectativas y se desarrollan según sus relaciones personales, recursos y contexto.
Las elecciones académicas siguen mostrando una segregación por sexos: las carreras de educación, trabajo social o enfermería son sobre todo elegidas por mujeres. Las ingenierías, por hombres.
El análisis objetivo sobre las causas de nuestros fracasos es fundamental para evitar, por un lado, un bajo autoconcepto, y por otro, justificarnos para no hacer los cambios que necesitamos hacer.
Desmitificar el trabajo para toda la vida nos ayudará a reducir la presión sobre las decisiones, a sentirnos libres de cambiar y a comprender que descubrir la vocación puede llevar muchos años.
Uno de cada tres estudiantes abandonan el grado que han elegido el primer año de carrera. El trabajo para reducir este porcentaje empieza antes del bachillerato, con habilidades blandas como el autoconocimiento.
Para que el teletrabajo sea productivo para la empresa y beneficioso para el trabajador es prioritario un buen diseño de tareas y valorar a las personas trabajadoras por los objetivos alcanzados.
Una baja percepción de autoeficacia, un reducido uso de su red de contactos y una baja planificación de su carrera, son algunos de los obstáculos autoimpuestos que se encuentran las mujeres directivas en el desarrollo de sus carreras.
Si tenemos en cuenta que la esperanza de vida ha retrasado la edad de jubilación, conviene enfrentarse a los años a partir de los 50 como años productivos en los que poner en práctica cambios y sueños.
Los talentos sobresalientes son el objetivo de los cazatalentos, quienes se guían por los éxitos pasados de los candidatos para predecir sus comportamientos futuros.
A nivel mundial, un 31% de los directivos son mujeres. Y hay más mujeres directoras y consejeras delegadas que nunca (26%). Quizás estas cifras todavía sean escasas pero dan esperanza a las nuevas generaciones.
Han cambiado los requisitos de entrada a una empresa pero también los candidatos. Ahora son nativos digitales, buscan entornos de trabajo más dinámicos y tienen CV más completos y otras expectativas vitales.
Director del Master in Talent Management de Advantere School of Management / Profesor asociado de la Facultad de Ciencias Economicas y Empresariales, Universidad Pontificia Comillas
Doctora en Economía y Empresa. Profesora e investigadora del área de Economía Aplicada de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de Ciudad Real, Universidad de Castilla-La Mancha