Las principales causas de muerte en jóvenes aumentan cuando se consume alcohol, por lo que se recomienda abstención total. Sin embargo, hay controversias sobre si una copa de vino diaria a partir de los 40 perjudica o no la salud.
Esta bebida de altísima graduación alcohólica se puso de moda entre los artistas decimonónicos, pero fue prohibida en muchos países por los graves problemas de salud que podía producir su consumo.
Un compuesto natural, la quercetina, parece responsable de las cefaleas que produce beber vino tinto. La mayor calidad del tinto está relacionada con las mayores concentraciones de quercetinas.
En verano aumenta la vida social y, con ella, el consumo de alcohol o refrescos y el picoteo de aperitivos y tapas que suman kilocalorías, grasa y sal a nuestro organismo. Esto no solo se traduce en un aumento de peso, sino también en un perjuicio para nuestra salud.
El alcohol es un bandido, que roba las vidas de millones de personas diariamente; es esclavista, porque somete nuestra voluntad hasta no ser dueños de nosotros mismos; y es asesino, porque mata a tres millones de personas al año, sin contar las muertes indirectas.
Consumir alcohol solo aporta calorías vacías que repercuten en nuestro equilibrio calórico, incrementando la ingesta total de energía. Y suele asociarse a una dieta de peor calidad.
Los consumidores tienen derecho a conocer la composición nutricional y el (elevado) número de calorías que aportan las bebidas alcohólicas, pero la normativa actual no obliga a las compañías a facilitar esta información.
Adultos alcohólicos, adolecentes que abusan de la bebida e incluso los niños cuyas madres han consumido alcohol durante el embarazo pueden sufrir serias alteraciones neuronales.
Las campañas de prevención sobre los peligros del consumo de alcohol tienen más probabilidades de influir en el comportamiento cuando implican a los jóvenes que cuando siguen siendo prescriptivas.
Está científicamente comprobado que el inicio a edades tempranas en el consumo de alcohol reduce la capacidad del cerebro para resistir los estragos del envejecimiento.
Basándonos en la evidencia científica, ningún profesional o institución debería recomendar el consumo de alcohol para mejorar la salud. Y convendría retrasar la edad de inicio al consumo.
J. Javier Meana, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea et Luis F. Callado, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
En los últimos meses han aparecido numerosas noticias en prensa relativas a la supuesta utilización de “éxtasis líquido” para cometer abusos sexuales, robos o asesinatos. ¿Cómo funciona esta sustancia?
Las sustancias psicoactivas tienen consecuencias negativas bien conocidas para la salud. Pero también pueden cambiar la expresión genética de los usuarios y de sus hijos. He aquí cómo.
Dejar de beber no basta. Es cierto que los daños que ocasiona el alcohol sobre el cerebro revierten conforme avanza el tiempo sin consumirlo. Pero en la fase temprana de abstinencia, el daño cerebral empeora. ¿Por qué?
La biología nos dice que a los 18 años el cerebro no ha madurado. Retrasar la edad legal de consumo de alcohol puede posponer el consumo entre adolescentes y reducir sus efectos negativos.
Catedrático del área de Biología Celular. Investigador asociado del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo. Investigador en metabolismo, envejecimiento y sistemas inmunológicos y antioxidantes., Universidad Pablo de Olavide
Profesor de Psicología Criminal, Psicología de la Delincuencia, Historia de la Psicología, Perfilación e investigador psicosocial. Experto en historia de la novela gráfica., Universidad Camilo José Cela