En la novela ‘Cuento de Navidad’, Dickens describe los efectos en la salud de los niños de las terribles condiciones de vida en las ciudades industrializadas. La tuberculosis era cruel y devastadora.
Cementerio de Longbyearbyen (islas Svalbard, Noruega) donde yace un grupo de mineros víctimas de la epidemia de gripe de 1918.
Shutterstock / bmszealand
Viruela, peste, sida, fiebre porcina, covid-19… Los virus han desempeñado un papel esencial en episodios fundamentales de la biografía humana.
El pueblo de Tournai entierra a las víctimas de la Peste Negra. Miniatura de Pierart dou Tielt que ilustra una obra de Gilles li Muisit (Tournai, c. 1353).
KIK-IRPA, Bruselas
En la Edad Media, ser médico equivalía a tener un estatus económico y social muy elevado. Algunos, entre salvar su vida y cumplir con su obligación, optaban por lo primero, sobre todo en épocas de epidemias.
Aunque afecta principalmente al tracto respiratorio superior, el SARS-CoV-2- también ataca otros órganos, entre los que podría estar incluido el cerebro, lo que explicaría algunos problemas cognitivos.
Laboratorio de análisis clínicos del Hospital Civil de Málaga. Años 50, siglo XX. Foto Arenas / Archivo Fotográfico de la Universidad de Málaga.
@CTI-UMA
La incertidumbre de cuándo llegará (o llegó) el pico de una epidemia y cuánta gente va a ingresar en el hospital permite aplicar unos modelos matemáticos llamados cadenas de Markóv.
La plataforma Go.Data permite rastrear a las personas infectadas y sus contactos.
OMS
Algunas regiones europeas y latinoamericanas están utilizando una plataforma de investigación de brotes desarrollada tras la epidemia de ébola para gestionar la emergencia de COVID-19.
John William Waterhouse, A Tale from the Decameron.
Wikimedia Commons / Lady Lever Art Gallery
La música compartida nos trae unidad y consuelo. Así la usó Boccaccio en su Decamerón, cuyos personajes, confinados por la peste en la Florencia medieval, terminaban cada jornada con una canción.
El triunfo de la Muerte, óleo de Pieter Brueghel el Viejo.
Wikimedia Commons / Museo del Prado
Peste es la palabra latina para “epidemia”: la que asoló Europa en la Edad Media tuvo puntos en común con la actual. Hubo cuarentenas que dificultaron el comercio y consecuencias económicas duraderas.
Una escuela cerrada en la ciduad de New Rochelle, Nueva York, 11 de marzo, 2020.
AP Photo/Chris Erhmann
Vicente Soriano, UNIR - Universidad Internacional de La Rioja
Las pandemias respiratorias víricas suelen remitir en verano. Porque la temperatura elevada reduce la estabilidad viral. Y porque los rayos ultravioleta del sol inactivan al virus.
A punto de la probable declaración de pandemia por parte de la OMS, es hora de valorar los posibles escenarios y cómo actuar para prevenirlos.
Alex Azar, el secretario de salud pública en Estados Unidos, presenta en el Senado sobre el coronavirus, 25 de febrero, 2020.
AP Photo/J. Scott Applewhite
Las autoridades de salud pública en los EEUU advierten que el coronavirus, que se ha propagado en distintas partes del país, se avecina y el país necesita estar preparado.
La mala comunicación o la desinformación en relación con las epidemias también pueden causar víctimas. De ahí la importancia de que las autoridades sanitarias manejen bien los mensajes que trasladan a la ciudadanía.
Jabalíes que campan a sus anchas en zonas urbanas o epidemias porcinas con graves efectos sanitarios y económicos. Son solo dos ejemplos de la laxa gestión de la fauna, sobre la que han advertido 25 expertos europeos, entre ellos cuatro científicos de la Universidad de Castilla-La Mancha, en un manifiesto publicado en “Science”.
Contratada Doctora Interina. Departamento de Ciencias Médicas. Área de Microbiología. Laboratorio de Virología Molecular., Universidad de Castilla-La Mancha
Profesor Titular de Universidad, Departamento de Ciencias Médicas, Área de Microbiología, Laboratorio de Virología Molecular, Universidad de Castilla-La Mancha