Tefi es la evolución de los perros robots, cuadrúpedos mecánicos que han aprendido a caminar con soltura por espacios irregulares. Tefi es el primer robot lazarillo. Vendrán más.
El uso de ChatGPT puede suponer una revolución en la elaboración de trabajos estudiantiles: profundizar en la capacidad crítica puede ser mejor que tratar de prohibirlo o detectarlo.
¿La agricultura autónoma será una realidad en pocas décadas? La automatización de toda la cadena de producción, del campo a la mesa, empieza a consolidarse. No obstante, queda mucho recorrido, no solamente técnico, y numerosas áreas de la I+D+i deben contribuir.
Activistas contrarios a los robots armados se manifestaron ante el ayuntamiento de San Francisco el 5 de diciembre de 2022 para expresar su rechazo a este uso de la tecnología.
Shutterstock / Phil Pasquini
Julián Estévez Sanz, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Boston Dynamics, junto con otras empresas del sector de la robótica, ha firmado el compromiso de no armar a sus productos ni utilizarlos para conflictos. ¿Qué les ha llevado a esto?
AARON, el robot pintor, creó su primera obra en 1973, cinco décadas antes del nacimiento de DALL-E, BOTTO, Midjourne y el resto de inteligencias artificiales capaces de crear obras de arte que en estos momentos están rompiendo las reglas del juego.
Las innovaciones tecnológicas no pueden reemplazar a los humanos en todas las tareas productivas. Por ahora, la batalla ‘humanos contra robots’ sigue relegada al plano de la ficción.
Fuerza, resistencia, rigidez, precisión… Las grandes bazas de los robots de materiales rígidos son también su punto débil. La nueva robótica apuesta por creaciones blandas, flexibles, que imitan a la naturaleza.
Usuarios del Centro de Día de la Fundación Instituto San José (Madrid) realizando sesiones grupales con el robot Inrobics Rehab.
Inrobics Social Robotics
Mediante juegos, el robot Robic ofrece sesiones de rehabilitación a personas que presentan limitaciones en su capacidad motora, cognitiva y social. El objetivo es potenciar la motivación de los pacientes.
La inteligencia artificial puede ayudar a desarrollar la empatía en la infancia. Existen robots sociales capaces de interactuar con los niños y ayudarles a identificar emociones y su expresión.
El robot Atent@ se ha realizado en el marco de la tesis doctoral de Jonnathan Santiago Berrezueta Guzman. Esta tesis la co-dirigen María Luisa Martín Ruiz e Iván Pau de la Cruz ambos profesores e investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid. Contando con la colaboración de Nuria Máximo Bocanegra de la Universidad Rey Juan Carlos. /
Jonnathan Santiago Berrezueta Guzman
Ante la necesidad de conseguir que los jóvenes con TDAH tengan autonomía para realizar sus deberes, nació el robot Atent@, que les acompaña para planificar sus tareas y mantener su atención.
Dada la complejidad de las emociones humanas que, como el amor, pueden tener connotaciones positivas o negativas según la situación, ¿podemos enseñar a un robot a sentir o a ser empático?
Imagen de microscopía electrónica de transmisión de la especie M. gryphiswaldense.
Wikimedia Commons / Caulobacter subvibrioides
Lucía Gandarias, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea and Lourdes Marcano, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
El uso de nanorrobots capaces de transportar medicamentos exclusivamente a la zona afectada y atacar simultáneamente a las células tumorales es una estrategia altamente prometedora contra el cáncer.
Concha Monje, con el robot humanoide TEO de la Universidad Carlos III de Madrid.
TELOS
La sociedad se enfrenta al reto de resolver los problemas de la robótica tradicional y prepararse para una nueva revolución en la que los robots blandos representan un cambio sustancial.
Actualmente, gracias a la inteligencia artificial y la huella digital de una persona que ha fallecido, es posible recrear conversaciones con quienes ya no están. Sin embargo, esto podría suponer riesgos para aquellos que están sufriendo el duelo.
Pensamos que la inteligencia artificial es autónoma, pero tan solo es un objeto sujeto a un ‘software’. Por ello quizá no quepa hablar de una ética para las máquinas, sino de una ética para los humanos que utilizan la inteligencia artificial. ¿Con qué objetivo? Buscar la vida buena aristotélica. ¿Con qué ética? Ese es el debate.
Los robots sociales están desempeñando un papel decisivo durante la pandemia COVID-19. La creciente implementación no solo evidencia su utilidad, sino también cómo el miedo a estas máquinas autónomas se desvanece ante un frente común.
¿Se pondría usted en manos de un robot para una cirugía? Los robots que operan existen hace más de lo que imaginamos. Incluso hay algunos que ya son autónomos. El proyecto universitario europeo Hipernav trabaja para que los robots operen tumores.